Veterano de la vida y de su historia era mi Abuelo. Aferrado jalaba al interior la fuerza de la vela que consumió hasta sus ganas. En su último respiro pasó al silencio, sostuvo su silueta, soltó la piel, exhaló dejando libre el alma al aire. Nos impregno su adiós y así descansó.
Andará seguramente con sus amores que se le adelantaron, con su Mamá que tanto buscó y a la ultima que dejó de amar decía. Con mi Abuela a la que con él, me despido otra vez, enviándole a su viejo que tanto la extrañaba, besos y abrazos que me faltaron, y todas las bellas rosas que siguen floreando en su jardín.
Ya te traigo, -zapatutanchi-
+ Dr. Carlos Tapia Tellez
te voy a extrañar mucho Abuelito
